.45
LEONARDO
Por debajo del catolicismo oficial, eclesiàstico y teològico, que acepta verbalmente, sin conocerlo, Sancho Panza tiene la religión iberica, prè-cristiana, que acaso culminò en los graves pensamientos de nuestro Seneca, el cordobés. Aquel noble espiritu, el delicioso y melan-cólico analista corno usted le llama, mi infortunado ami-go Angel Ganivet habló alguna vez del senequismo corno fior de la religiosidad espafiola, grave y austera.
El catolicismo es, usted lo sabe, mas que una religión, una filosofia de la religión, y una filosofia escolàstica, medieval. Ha sustituido a los misterios con una explicaciòn de los misterios y no contento con exigir la fé en Dios se empcna en que le existencia de Este es lògica — y silogisticamente I ! ! — demostrable y fulmina anatema contra quien crea en Dios y à la vez que es indemostrable su existencia. No le basta que se siga y se practique el bien, si no que hay que hacerlo por las razones que ella, la Iglesia, estima debe hacerse. El catolicismo, que se ha pasado estos siglos, bramando contra el racionalismo, agoniza por racionalista ; la teologia mata la fé. Aristóteles es el veneno que Santo Tomas acabó de meter en los dogmas. Y 'vea aqui por-que la Iglesia rehuye todo problema dogmàtico — los ultimos intentos del noble y docto abate Loisy lo prue-ban — y se mete en accion social y politica. A los cu-ras Ics interesa mas el Derecho Canònico que no la Teologia Dogmàtica. Temen tropezar en concepciones del Siglo XIII.
El catolicismo es, si, racionalista, aunque sea de. razon flaca, pobre y arcaica. Apenas hay espiritu educa-do en el catolicismo que sienta a Kant, aunque le comprenda. Los espiritus de tradicion católica que no han sabido sacudirse el racionalismo escolàstico medieval se quedan en la critica de la razon pura cuando pierden la fe heredada, no llegan a la razón pràctica. Y es que este salto ó este paso, que tanto nos cuesta a los formados en ambiente católico — en el interesante libro de Arnaldo Cervesato Primavera d' idee, acabo de leer una cita de